No se si hubo un profesor que marcara mi existir, pero si hubo una profesora a la cual recuerdo por su particular forma de ser. Ella fue mi profesora de Química en primero medio, uno de los ramos que mas me asustaba porque no tenia conocimientos previos de este ramo y todos decían que era muy difícil ,además se suponía que el colegio donde estaba era muy estricto.
Esta profesora, cuyo nombre no recuerdo, era una señora o señorita (nunca supimos su estado civil) de mucha, mucha edad prácticamente una de las principales reliquias de mi colegio, de baja estatura y tez morena, la “tuto” como era conocida en todo el colegio usaba grandes lentes para leer y también el típico delantal blanco. Su particularidad era que esta profesora cada vez que pasaba la lista o explicaba algún ejercicio en el pizarrón tendía a cerrar sus ojos por un prolongado tiempo, o en otras palabras se quedaba dormida. En un principio creí que era parte de la clase, una nueva forma de llamar nuestra atención, pero con el correr de los meses y averiguando con cursos mas grandes me di cuenta que ella era así.
Tenia un carácter terrible, uno pensaba que la podía engañar pero lamentablemente ella era la que nos engañaba y era casi imposible tener nota arriba de 4.
Debo admitir que en sus clases no aprendí mucho ella era un poco enredada para explicar, además siempre nos dedicábamos a decirle incoherencias pero ella se hacia la desentendida, nunca nos explicamos porque le sucedía eso, ¿habrá sido producto de la edad?, ¿habrá sufrido de anemia?...
1 comentario:
me gusto mucho la forma de redaccion, creo que fue super didactica y dieron ganas de que hubiera segido un segundo capitulo con la tuto.
de verdad me rei mucho.
fue un tanto infantil mi comentario pero tenia que decirlo.
santiago.
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