(M) La Gran fiesta

Todos los años eran iguales, pero había una semana en especial, esa era la segunda semana de octubre, en la que el colegio Guillermo González Heinrich, institución de gran prestigio por su variedad de especialidades, sacaba a relucir lo mejor de si.

Se podía sentir en el aire el entusiasmo de aquellos jóvenes que durante 5 días daban el todo por sus alianzas, a diversos tipos de pruebas tenían que someterse, para que así su alianza pudiese salir ganadora, ¿el premio? Sentirse ganadores.

La culminación de aquellos días extasiados de aniversario terminaban en una de las mejores fiestas de colegios del sector.

El invitado principal de la jornada era nada más y nada menos que la súper “Sonora de tommy Rey” regalo que lo financiaba la sostenedora del colegio.

Tenían luces, humo, pantallas gigantes, pulseritas fluoor y todo lo que podía llamar la atención, lo tenían ellos ¿Quién mas? Lo que pasaba esa noche era tema obligado para lo que quedaba de año.

Y así fueron durante mucho tiempo las fiestas de este pomposo centro educacional o por lo menos son así como se les recuerda.

Santiago